Hallidie es ideal como sede central del AIA. Diseñado por Willis Polk y bautizado en honor al inventor del icónico sistema de tranvías de la ciudad, la estructura de ocho pisos figura en el registro nacional de lugares históricos, en parte por ser el primer edificio con paredes vidriadas en Norteamérica. Actualmente, el edificio es candidato al nivel Silver de la certificación LEED.

En el interior del edificio, el nuevo espacio de oficinas del AIA es visitado por cientos de profesionales de diseño todos los meses y se aprovecha como punto de exhibición de productos que contribuyen a un diseño sostenible. Cualquier rediseño del espacio llamaría la atención, particularmente si se concentra fuertemente en tecnologías para ahorrar energía. La solución propuesta debía ser apropiada desde el punto de vista estético congruente con el enfoque minimalista de la sede central del AIA, cumplir con normas sobre el consumo de energía del estado de California, como el Título 24, y respetar los requerimientos de preservación histórica.

Janet Nolan, diseñadora de iluminación de J S Nolan + Associates Lighting Design fue la mente creativa que ideó la sofisticada solución de iluminación fácil de usar y con gran capacidad de respuesta.

“Lutron creó este sistema de alta eficiencia que responde al movimiento del sol y baja las cortinas automáticamente según la hora del día y el día de la semana”, dice Margie O’Driscoll, la directora ejecutiva de la oficina. “Un beneficio real aunque imprevisto del sistema es que podemos anularlo, si bien rara vez lo hacemos. La luz siempre parece ser la adecuada. Además, nuestro personal es reducido y tenemos más de 50 programas y reuniones por mes. Que el sistema funcione la mayor parte del tiempo por si solo, marca una diferencia muy importante. Y por ejemplo, cuando tenemos que transformar la galería en un espacio para conferencias, podemos cambiar rápidamente las luces con solo presionar un botón. Los niveles de luz, las cortinas y las pantallas de proyección responden al unísono a nuestras preferencias predeterminadas. Es como hacer magia”.

Nolan agrega que el espacio también tiene que funcionar como oficina. “Las luces deben responder a factores humanos como el control del resplandor, los ajustes ergonómicos de cada persona y las preferencias de los ocupantes”.

Los balastros encienden las lámparas en cualquier nivel de atenuación predeterminado (sin titilar) y ofrecen atenuación a rango completo uniforme y continua sin parpadeos ni saltos en el nivel de luz. Los balastros también incluyen una tecnología patentada que uniformiza los niveles de luz, independientemente de la calidad de la energía eléctrica del edificio. Cada una de las zonas está programada, lo que permite maximizar la flexibilidad de todo el sistema de iluminación.

Christ Surunis, supervisor de cuentas en jefe de Lutron, dice: “Lo que quisimos hacer en el edificio Hallidie fue ahorrar energía por medio de un control automatizado sin poner en riesgo la comodidad ni la experiencia de los ocupantes. Las placas frontales con grabado para las diversas estaciones de control permiten que los visitantes comprendan el propósito de cada teclado y puedan modificar fácilmente los niveles de luz. Cada una tiene botones de ‘escenas’ claramente definidos como exposición, reunión, evento y presentación”.

Eso, a su vez, preserva la estética y utilidad a largo plazo del mobiliario y los materiales de recubrimiento de superficies. Las cortinas también ayudan a reducir la acumulación de calor solar en verano y sirven como aislamiento en invierno, lo que protege las telas y el mobiliario y mantiene la comodidad del espacio para las personas. Si ingresa demasiada luz natural por la ventana, el sistema de persianas y cortinas puede accionarse automáticamente o responder a un control manual con pulsador que se puede utilizar desde diversos lugares. “Pretendemos usar las cortinas Sivoia QED cada vez más”, dice Nolan. “Con las telas solares, se transmite al espacio la cantidad óptima de luz.

Lutron es excelente. Trabajamos en estrecha colaboración con el representante local de ALR (Associated Lighting Representatives, Inc.) y un ingeniero de servicio de Lutron estuvo siempre a nuestra disposición para ayudar con la puesta en funcionamiento, el ajuste fino y la reprogramación periódica”. “En Lutron, reconocemos la importancia de cooperar con otros para asegurar resultados adecuados y duraderos”, afirmó Surunis.

En esta aplicación, como líder en el control de iluminación, Lutron colaboró con un nombre reconocido en luminarias de alto rendimiento, Zumtobel, para brindar una solución confiable y con una óptima respuesta. Los componentes se instalaron previamente y se probaron en la fábrica para que el arquitecto, el diseñador de iluminación, el propietario del edificio y los ocupantes quedaran completamente satisfechos. En su combinación de tecnología moderna, arquitectura histórica y sensibilidad estética, el diseño de iluminación de la sucursal de San Francisco del Instituto Estadounidense de Arquitectos (AIA) es un testimonio de que las antigüedades realmente se pueden renovar.